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Casa Pellicer i Jordan

Ibelia.jordan



La marquesa cuando terminó su baile con Alvaro acudió al lado de su esposo que bebía y comía mientras charlaba con los invitados.
Ya iba a preguntar por su hija cuando la joven Pellicer hizo su entrada.
Estaba preciosa, tal como Ibel se había imaginado que sería. Su elegancia, don de gentes, saber estar y educación exquisitas eran a la par de su discreción, los atributos que cualquier madre sería feliz de que sus hijos hicieran gala.

-Ysu, mira nuestra pequeña. . . Ha crecido, ya es una dama. ¿No te parece? Cualquier día aceptará a uno de esos pretendientes que tan poco estimas y nos hará abuelos.
Ibelia se asustó ante semejante idea. -Mejor no pensar en ello, hoy disfrutemos del momento. Estoy tan orgullosa de ella, no debería preocuparme. Tomó de su copa un sorbo y sonriendo a su esposo continuó.
-He visto que Neli andaba tramando algo. . . a ver con que nos sorprende esta noche.

Buscó a su amiga por la sala pero no la vio; lo que si se diio cueta que Aliena ya estaba bailando una de las danzas más alegres y populares con Alvaro.
-Pareciera que aquel joven se movía con gracia en los salones igual que lo hiciera en los campos. Pensó, luego miró a su esposo y se percató que miraba en la misma dirección.

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Nelidha


Se ausentó unos instantes para mudar sus ropas. Vistió con delicados velos y suaves sedas. Dejó su pelo suelto, ligeramente atado a penas a ambos lados. Se escondió entre los músicos y pidió que tocaran una melodía. Sabía que interrumpiría el baile, pero era el momento de captar la atención.

Deseaba agradecer a los Marqueses la maravillosa bienvenida y también las comodidades que le habían brindado a ella y a sus compañeros de viaje.

Comenzó a bailar, delicadamente, despacio y siguiendo la música. Moviendo las sedas de su traje. Sonreía en todo momento y se deslizaba acercándose a todos los presentes.
En uno de los giros se acercó a Ibel, lo justo para darle un cálido y rápido abrazo. Aprovechó para susurrarle: - Esta no será mi única sorpresa amiga.

Continuó bailando hasta dejar caer todos los pétalos que llevaba con ella.

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Alienaa


Mientras daba su bienvenida se le acercó un joven, presnetándose como Álvaro del Bosque.

-Es un placer conocerle Álvaro. - Le dijo en respuesta, sonriéndole.

-Quizás le parezca algo precipitado, pero... me concedería esta baile?

Aliena se sonrojó ante la inesperada pedida de baile. Nunca antes había bailado con un caballero, con sus padres y familiares desde pequeña sí que había danzado, pero iba a ser diferente.
-Todo un gusto compartir este baile, caballero. - Aceptó sin pensarlo mucho, sintiendo los nervios a flor de piel. -Qué mejor que conocerse dando un baile. - Pensó.

Posó sus manos junto a las del caballero y empezaron a entrecruzar sus pies y a girar al son de la música. Aliena pensaba que en cualquier momento tropezaría y haría perder el equilibrio de ambos. Sacudió su cabeza intentando quitarse tal idea de la mente y se dejó guiar por Álvaro, quien destacaba en su soltura con el baile.

Pero de repente, la música cesó. Ambos pararon en seco, extrañados ante tal incidencia. Pero sin apenas dar tiempo a decir palabra ante lo ocurrido, los músicos iniciaron una melodía y entre ellos, apareció una dama danzando con una vestimenta fina de velos y sedas mientras esparcía pétalos por la sala.
Al poco reconoció a Neli bajo aquellas suaves telas, se movía con la misma ligereza que la seda, como si el aire la elevara y siendo guía del compás de cada nota de música. Aliena, quedó boquiabierta ante tal majestuosa danza.

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Nelidha


Tras dejar caer todos los pétalos. Finalizó su danza, acercándose a una de las parejas, el joven Alvaro y la Marquesita Aliena, que con cara de extrañeza miraron tras la interrupción de la danza.

Le sonrió a ambos, y frente a ellos los reverenció, inclinándose y agitando su mano frente al rostro, con un delicado y discreto vaivén de su diestra. Se retiró volviendo tras sus propios pasos; a cierta distancia de los músicos, pidió que continuaran las melodías. Invitando con ello a la joven pareja, que reanudara su danza.

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Alvaro_delbosque


Álvaro estaba realmente sorprendido. Primero, hubo un cambio en la melodía, y apareció una mujer con un vestido de velos haciendo un baile que no había visto nunca, soltando pétalos del flores por donde pasaba. Pero había que reconocerlo, bailaba bien.

Se dio cuenta de que Aliena había quedado boquiabierta, y con razón, porque él también había quedado admirado.

Cuando aquella mujer se acercó, se dio cuenta de era Nelidha. Cuando ella sonrió, él también, y cuando Nelidha se fue, y volvió a cambiar la música, Álvaro se giró hacia Aliena y le preguntó:


Continuamos?

Le sonrió, y le cogió la mano para seguir con la danza
Alienaa


La música fue cesando poco a poco, al igual que desaparecía la bailarina.

-Continuamos?

La voz del joven interrumpió a Aliena de su embaucamiento. Sacudió su cabeza y dirigió toda su atención hacia Álvaro, quien le sonreía mientras sentía su cálida mano agarrar la suya.

-Por supuesto.
- Le contestó sonriente, mientras de nuevo se colocaban para el baile.

Los músicos empezaron una nueva pieza y los dos jóvenes iniciaron, o más bien continuaron, con el baile.
La interrupción de Nelidha había hecho apaciguar los nervios de la hija de los Marqueses, quien ahora seguía el baile sin temor a tropezar. Y esa seguridad se hacía notar, pues llevaban un ritmo mucho más fluido que antes.

Alienaa disfrutaba del baile, sus ojos se encontraban con los de Álvaro y le sonreía mientras se retaban a aumentar la velocidad de sus pasos, siguiendo el compás de la alegre música que paulatinamente se hacía más rápida.

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Nelidha


Cuando recién llegó al Castillo y antes de ir al salón donde estaban los invitados, se había escapado para decorar las ramas de los árboles cercanos al jardín del Castillo, los dejó listo para una sorpresa.

En la fiesta, la música volvió a animar el ambiente. La de ojos azules, se volvió a ausentar pero esta vez para ir a buscar a Nana, la ama de llaves. La avisó de que quería darle a sus amigos los Marqueses y los invitados, una sorpresa. Así Nana podría abrir las puertas para indicar a los invitados donde se debían dirigir.

Sus movimientos de aquí para allá alertaron a su amiga Ibelia. Neli se acercó a ella y le habló en voz bajita, para que no le escucharan los que estaban cerca.

- Ibel, amiga.. me gustaría proponer un sencillo juego, del que quiero regalaros un pequeño recuerdo.- la tomó del brazo mientras hablaba con ella y la llevó cerca de uno de los ventanales, para así poder guiarla en sus ideas. - Antes de venir al salón, me escapé y deje algo atado de algunas ramas de los árboles cercanos a la fachada, ¡esos de ahí!.- le dijo señalando con la mirada a través de la ventana. - Los cercanos a la entrada.-le indicó insistentemente para que se situara.

Le susurró al oído sus planes y todo lo que había preparado. Espera que se animaran todos a buscar, aquellos detalles que con tanto cariño le había traído a los Marqueses. Detalle que preparó, para agradecerles tan generosa amistad que con ella habían derrochado siempre a raudales, sus amigos de la Familia Pellicer i Jordan.


El juego es sencillo, el que quiera participar ha de elegir un color que le guste, rojo, verde, amarillo... cualquiera que le agrade o se sienta identificado. Y rolear que va al bosque a buscarlo, allí lo ha de encontrar por "casualidad" en las ramas de los árboles (un lazo o tela del color elegido); detalle de los que Neli ha colocado en las ramas. Luego lo ha de llevar al salón, donde Neli estará para entregarle su regalo, pues de cada lazo o color elegido al azar para cada cual.. habrá algo preparado. Espero se diviertan buscando en el bosque lacitos. Buen juego.

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Ibelia.jordan




La marquesa disfrutaba de la magnifica fiesta y había aplaudido emocionada después de la danza de su amiga. Las sorpresas con las que Neli les había deleitado parecía que no tenían fin porque en aquel momento le estaba proponiendo un juego que prometía ser divertido.

La joven se acercó hasta ella y entre risas y en confianza le contó su plan. La tomó del brazo mientras se acercaban a los ventanales que daban al jardín, mostrándole los árboles cercanos.

-Me parece una gran idea Neli, será muy divertido para todos. Le contestó La dama.
-Ya estoy deseando salir en busca de esas cintas. Cuando quieras podemos empezar.
Si te parece explicas el juego para que podamos ir cuanto antes. Estoy impaciente.
Le decía con una sonrisa complice.

Ibelia, cuando la música cesó, requirió la atención de sus invitados.

-Estimados amigos espero que se esten divirtiendo esta noche. Ahora nuestra querida Nelidha nos va a proponer un juego poniendo a prueba nuestra sagacidad y valentía.


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Alvaro_delbosque


Álvaro disfrutaba la fiesta, especialmente el baile con la joven Aliena. Hay que decir que, si ella estaba nerviosa, él también estaba algo nervioso, pues temía quedar mal o dar un traspiés. Pero ambos bailaron bien, aumentando la velocidad de los pasos a medida que aumentaba la de la música, hasta que al final cesó, y la marquesa habló:

Cita:
-Estimados amigos espero que se esten divirtiendo esta noche. Ahora nuestra querida Nelidha nos va a proponer un juego poniendo a prueba nuestra sagacidad y valentía.


Esto había dicho la marquesa. El joven Álvaro se preguntaba en qué consistiría el juego, aunque las palabras "sagacidad" y "valentía" le sonaban muy bien. Pero a pesar de que tenía muchas ganas de preguntar, se contuvo, aunque quizás se le notase la curiosidad en la mirada o en algún gesto, y esperó que alguien hablara. Miró un momento a Aliena, quizás buscando su mirada, o algún gesto que le hiciera saber qué hacer, aunque después pensó: *y cómo va a saber lo que estoy pensando? y si lo supiera, menudo ridículo... no tengo que parecer desorientado, al menos no aún... Y es que, al menos éste día, no quería parecer un patán o un ignorante. Puede que no tuviera idea de lo que iba a ocurrir, ni en qué consistiría el juego, pero tenía que recurrir a sus dotes de observación para darse cuenta de qué era, o preguntar discretamente a alguien con quien tuviera un poco más de confianza.

El pobre muchacho pudo sentir cómo le resbalaba una gota de sudor frío. Esperó que no se le notara. Con un "sea lo que Dios quiera" en su cabeza, decidió que trataría de no pensar demasiado. Al fin y al cabo, Álvaro estaba en la fiesta para divertirse.




_ojos_azules


Nelidha había conseguido atraer la atención de los invitados. Observé como se acercó a la puerta y comenzó a hablar:

- Me encantaría que me acompañaran al jardín, les propongo un juego, creo que será divertido para todos.- dijo ella en tono divertido y bien alto.

- En los árboles dejé atados algunos detalles para ustedes, busquen en las ramas de los árboles, serán fáciles de encontrar, pues tienen vivos colores.-explicaba ella en tono cordial mientras caminaba por el jardín hasta llegar cerca de los árboles. La seguí hasta allí, se volvió nuevamente hacia nosotros y nos dijo:

- Cuando hayan encontrado alguno de los detalles, vengan a la entrada, que intercambiaremos el detalle con el regalo que corresponda.

Me acerqué a uno de los árboles. En una de las ramas encontré una cinta de color amarillo, delicadamente atada. Me empiné un poco hasta alcanzarlo y deshice el lazo. Lo tomé en mis manos y volví al salón donde estaba Nelidha.

- Neli, encontré una cinta de color amarillo.- dije impaciente por saber cual era mi regalo.

        Amarillo presente en el sol y el oro,
        Áurea es la imagen de iluminación y pureza
        amarillo de mimosa, de espiga de trigo y de la genista,
        Dorado de las inteligencias, del humor y de la alegría,
        tu imagen es pionera y activa, a la vista de todos
        su viveza libera llamas, alegría y vida.


Quedé anonadada, pues no esperaba unos versos. Escuche a Neli que tras terminar de recitar los versos, me dió una cajita de color amarillo, que contenía un obsequio.





El color amarillo simboliza el optimismo, la claridad, calor...
Alienaa


La fiesta no podía ir mejor y además en cuanto terminaron con el baile, Ibel anunció que Nelidha propondría un juego dándole así paso a su explicación.
Aliena estaba disfrutando como una niña pequeña, normalmente las fiestas se tornaban muy burocráticas y perdían ese encanto de cercanía, amistad y familiaridad. Además de hacerse muchas veces muy aburridas.

En cuanto Nelidha terminó de explicar en qué consistía, los presentes se mostraron sorprendidos ante el inquietante juego y pronto los murmullos se hicieron cada vez más fuertes, curioseando sobre qué encontrarían. Rápidamente se crearon grupos que fueron saliendo de la sala acompañando a Neli al lugar indicado.

Ali miró expectante a el del Bosque, quien parecía abstraído en sus pensamientos y le dijo sonriendo:

-¿Vamos? Suena entretenido, ¡a ver qué encontramos! - Dijo curiosa mientras le tomaba del brazo. -Además, nos vendrá bien tomar algo de aire fresco y así también os enseño los jardines.

Después se sonrojó al ver la familiaridad que estaba mostrando con Álvaro, temiendo que no se sintiera cómodo. Al fin y al cabo recién acababan de conocerse y ya le estaba tratando con mucha confianza. Aún así no rectificó su actitud y le invitó a que se dirigieran hacia el jardín.

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Alvaro_delbosque


La voz de Aliena sacó a Álvaro de sus pensamientos. Y se dio cuenta de que había más gente que no sabía en qué consistiría el juego. Así que no habría nada de que preocuparse. Así que, cuando ella le tomó del brazo, y le indicó que la acompañara al jardín, él no pudo más que decir:

Yo también siento curiosidad. Y me encantará ver los jardines. Sobre todo con una compañía como la vuestra.

Y sonrió, y se dejó llevar hacia los jardines. Y una vez allí tuvo la impresión de que no serían los detalles tan fáciles de encontrar. Aunque quizás sólo le hiciera falta prestar atención a los detalles.

Ysuran


Ysuran escuchó la propuesta y tras ver como se llevaba a cabo el juego decidió participar también, tomó a su esposa del brazo para así conseguir que el resto los siguiesen y marchó al jardín.

Dio un pequeño vistazo y encontró la cinta azul, nunca le había caido bien ese color, no sabía por qué, y siguió por lo tanto buscando hasta encontrar la roja.

- ¡La tengo! Dijo al resto y volvió a la sala para entregarsela a Nelidha y recibir su regalo.

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Ibelia.jordan



La marquesa tenía en mente buscar la cinta roja que era su color preferido pero recordó que su esposo y ella coincidían en muchos gustos y uno de ellos era ese.

Cuando quiso salir a buscar, su esposo la agarró del brazo reteniendo su intento de adelantarse a los demás invitados.
-Cáspita!!Como me conoce este hombre! Pensó mientras todos ya se habían puesto en movimiento abandonando el salón ya con prisas ya tranquilos, dependiendo del afán competitivo de cada uno.
Dejando a los músicos solos con su melodía
y los criados asomados a los ventanales veían como aquella gente se movía erráticos entre las antorchas del jardín. -Estos aristócratas están locos. Pensaban mientras

Ibelia cuando salió al jardín se soltó de su esposo buscó y buscó y buscó su cinta roja pero no la encontraba En un momento vio que Ysuran ya la llevaba en la mano.
Con gesto de fastidio volvió al árbol de la cinta Negra y esa fue la que llevó al salón.

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Alvaro_delbosque


Para no ser menos, Álvaro también se puso a buscar, entre los árboles y arbustos del jardín. Buscaba y buscaba y vio algunas cintas de diferentes colores, aunque siendo de noche y con la sóla luz de las antorchas era difícil saber el color real de la cinta. Además no sabía bien qué color elegir.

Al final pensó en el verde. No sabía si sería un verde brillante o un verde hoja, aunque en ese momento poco importaba. Dejó algunas por no estar seguro de qué color era mientras pensaba en el dicho de que por la noche todos los gatos son pardos, hasta que vio una en un lugar mas o menos visible. La tomó y la acercó un poco a una de las luces:


Sí, de color verde! que suerte!

Pero no quiso apresurarse a buscar lo que fuera que le dieran por la cinta. Al fin y al cabo, el regalo era lo menos importante. No es que Álvaro fuera, ni mucho menos un hombre rico, ni tampoco era un anacoreta desprendido de todo interés medieval. Simplemente, le habían educado para darle a cada cosa la importancia que tiene.
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