Afficher le menu
Information and comments (0)
<<   <   1, 2, 3, 4, 5, 6   >   >>

[RP] El mercado de Zaragoza

--Merluza_el_pescadero


Buena falta le hace más agua a sus pies, le dice el viejo pescador al noble caballero chillón, de momento por allí retiremos ese olorcete que dudo que sean de mis frescos pescados, termina diciendo mientras toma amenzante su cuchilla que usa para la limpieza de los pescados, porque no se ahorra otro dolor de cabeza y se serena señor....
Piluso


Parece que llego a tiempo... die Pilu levantando su voz y tomando la cuchilla de la mano de don Merluza, creo mi amigo que no hace falta que uses esto... al menos de momento.... y observando a zebaz le saluda a El con una leve inclinación de su cabeza y otro a la noble dama que le acompaña, que ocurrió aquí, me comentaron de un robo....
Chygro


Chygro iba andando tranquilamente por el mercado y se cruza con Piluso y aprovecha para preguntarle:

-¿Oye, que campo me recomiendas que eliga?¿Cuál es el más conveniente?

Piluso


Piluso que trata de enterarse de lo ocurrido es interceptado por el nuevo vecino Chygro, hola amigo, le dice Pilu, mira ahora estoy tratando de ver que ocurre en este alboroto, pero haces muy bien en preguntar, yo ni bien termine esto, voy a la alcaldía a hacer un relevamiento de campos y veo como esta nuestro alicaido mercado y te envio un correo con Pedro nuestro asistente en el ayuntamiento, el hoy mismo sin falta, y por otro lado es una alegría verte aquí...que piensas de este lio del robo, acaso tu viste algo?
--Pilarica


Muchos ruidos y gritos había escuchado la muchacha. Al parecer alguien robo a alguien, un noble por lo que estaban hablando las clientas. Eso no era nada bueno, robar a un noble no permitiría ni la mas mínima posibilidad de que el ladrón sobreviviera si lo pillaban las autoridades.

Pilarica no quería distraerse con sus propios pensamientos y trató de recomendar a la señora que estaba indecisa ante algunos de los sombreros que vendían.

- Si me permite recomendarle señora, creo que a su hija le quedaría muy lindo este de aquí.

Pilarica tomó el sombrero en las manos para animar a la clienta a probárselo.

Ricardo, el muchacho del puesto de al lado, llegó corriendo y alarmado.

-Pilarica, Pilarica...que el señor Merluza está con cuchilla en mano amenazando al Barón de Illueca

- ¿Qué me cuentas Ricardo?- exclamó alarmada mientras salia disparada hacia el puesto del señor Merluza, era su padrino y no permitiría que hiciera ninguna tonteria- Mil perdones Señoras ahorita vuelvo, Ricardo, ¿podrías decirle a mi padre lo que ocurre cuando lo veas? gracias-

Afortunadamente cuando llegó al puesto del Señor Merluza vió que el señor alcalde había llegado a tiempo para evitar grandes males. La muchacha se abrazó al señor Merluza a pesar de odiar el olor a pescado que desprendía incluso los domingos cuando iban a misa

- ¡Padrino!, ¿estás bien?- Miro inquisidora al barón y enseguida desvió la mirada hacia el alcalde - Gracias señor Piluso por intervenir
Kroke


Kroke no encontró lo que buscaba, los carniceros parecían no tener ganas de vender ninguna de sus mercancías, así que contrariada se dió media vuelta y siguió su camino por el mercado sin seguir ningún rumbo fijo, simplemente mirando los puestos, las materias, las caras conocidas y no tan conocidas de esa ciudad.

No había demasiadas gentes proclamando sus mercancías, algunos ciudadanos tenían en venta sus productos pero no se preocupaban de manifestar la calidad de los mismos, ni el precio al que se encontraban y aún así confiaban en venderlos.

Ella siempre había disfrutado del ambiente en los mercados, le parecía que el auténtico espíritu de cada ciudad se encontraba en los mercados, y ciertamente Zaragoza parecía escuetamente habitada. Eso era lo que siempre solía ocurrir durante los veranos en la ciudad capital.

La muchacha conocía cada rasgo y cada opinión de unos pocos habitantes, pero desconocía si existían otros que se preocuparan en opinar. Enfrascada en sus locuras y desvaríos no acertó a frenar a tiempo y se dió de bruces con el alcalde que estaba en mitad de mediador en algún tema que implicaba a un señor pescadero y el Barón de Illueca.

- ¡¡Upss!! ¡Perdone señor alcalde, no estaba pendiente de mis pasos!
Alexia_del_prado
Y en otro lugar del Mercado...




Alexia siempre disponía de un tiempo para ir al mercado a hacer las compras, no era mucho del agrado de Pilu, porque siempre iba por la carne, verduras o algo necesario, y regresaba con pescados, yuyos aromáticos y muchas cosas que al llegar allí le tentaban. Además, siempre se entretenía charlando con los puesteros, sin lugar a dudas era un lindo momento de distracción...
Piluso


Bueno mis amigos, creo que esto no debería pasar a may..…. esta diciendo Pilu cuando siente como alguien se tropieza con su persona, pero.. que pasa… dice dándose vueltas, Kroke, amiga mía que crees que soy unas de esas reces que cuelgan de los ganchos?, a Pilu no le queda otra que reírse ante el tropiezo de su amiga, bueno gente creo que podemos solucionar esto de manera civilizada, menciona mientras observa al viejo pescadero y al noble que sufrió el lamentable percance del robo, debemos dar parte a la policía para que ubique a ese ladronzuelo, la pobreza no implica que deba robar e infringir las leyes, de todas maneras si se da con El voy a mantener una charla con el muchacho y ver si le podemos encaminar de alguna manera, siempre hacen falta manos en e ayuntamiento para trabajar.
Pilu nota como alrededor de los personajes intervinientes mucha gente ya es la que se agolpa de pura curiosa, a ver gente creo que hay mucho trabajo en este mercado como para estar perdiendo tiempo no?, y desviando la mirada a su amiga Kro, le pregunta: viste a mi amada esposa en alguna de los puestos?....
Kroke


Sonrió ligeramente ante las risas de Piluso. Últimamente Kroke estaba en muchos sitios menos en donde tenía que estar, demasiadas cosas estaba organizando para su futura vida y su poco cerebro lo tenía ocupado en casi todas ellas.

Tras la pregunta de Piluso acerca de la ubicación de su amada esposa, Kroke no pudo añadir mucha información.

- ¡Pueeeessss! - dijo alargando el final de la frase para darse tiempo a recordar si había visto o no a Alexia - me temo Piluso que no la he visto, y aunque me la hubiera cruzado tampoco la habría visto, ya sabes, ando con la cabeza demasiado abstraida ultimamemente - aclaraba mientras se encogía de hombros - Pero si quieres te acompaño a buscarla, lo que vine a hacer en el mercado no parece que puede llevarlo a buen termino -
Alexia_del_prado


Alexia vio a lo lejos un grupo de vecinos curiosos que charlaban mientras señalaban a algún lugar y por eso decidió no ir aun hacia ese sector aunque su curiosidad se estaba despertando, y se quedó viendo algunas ofertas de ropa juvenily pensó en su hija Mary "esto le va a quedar precioso y el precio, caramba, no creo que le importe a Pilu o será que sí" y una sonrisa se dibujó en su cara viendo seguro el precio de la prenda.
Hola señora, que buenas prendas que tienen me podría mostrar otras?
Y allí se quedó Alexia viendo la última moda y sacando cálculos para evitar que le diera un patatús a Pilu...
Kroke


Iban abriendose paso entre los puestos cuando de repente Kroke recordó que sus fieras estaban muertas de hambre y solas en casa.

- Piluso, lo siento, me acabo de acordar que los gatos están muertos de hambre y solos en casa, me quedaré sin las pocas telas que tengo. Debo dejarte. Cuidate mucho

La rubia salio corriendo como alma que lleva el ...
Ph5


ph5, recién llegado, no había salido nunca de su choza, nada más que para ir a trabajar. Hoy a tenido algo de tiempo libre, pues una de las pocas cosas buenas de cortar árboles, es que se puede hacer en varias tandas.
Dando un paseo por la lustrosa ciudad, se encontró con un sitio peculiar, que antes no había percatado de su presencia.
Había diferentes puestos de alimentos, ropa, armas, la verdad, un sin fín de comerciantes agolpados por obtener a cualquier cliente que pasase por allí.
Sin embargo, poco podía comprar, pues apenas si tenía para atarse la ropa con un mísero cordel.

En una semana...estaré ahi vendiendo...-pensó.


Mientras todo un mundo se desarrollaba ante los ojos de ph5, quien, atontado, lo observaba con ojos interesados(y también com mucha hambre, que solo he comidó un mendrugo en toda la semana!!)
Kroke


El día había pasado volando entre diversas ocupaciones en su ciudad natal, la visita a la comisaria, la oficina de tribuno, visitas a buenos amigos, revisando su taller y su campo, y por supuesto darles unos achuchones a sus lindos gaticos, los cuales cuidaba su amiga Olaya. Se dirigía al campamento cuando decidió pasar corriendo por el mercado a ver si era posible comprar un par de cosas.
Le encantó ver que aún su ciudad conservaba algunos puestos abiertos y activos, y ciudadanos pendientes de unas cosas y otras. Había extrañado su ciudad y sus calles durante el tiempo que había estado con el ejército alejada de ella, y al fin de nuevo estaba de vuelta aunque las cosas no habían acabado aún. Todavía quedaban demasiadas cosas por resolver y temía que se le fueran todas de las manos.
Absorta en algunos de sus pensamientos encontró el puesto que buscaba y allí pudo comprar algo de carne, le ofrecieron carne de higado a muy buen precio y la rubia aceptó, había estado mucho tiempo sin comer en condiciones y eso le aportaría energía que igual fuese a necesitar en un futuro no muy lejano.
Con el paquete en la mano y desprendiendo ese olor característico se dirigió sin mas retraso al campamento donde le esperaban algunas compañeras.

_________________
Olaya


Olaya acababa de volver de su viaje, había ido para cerrar un episodio de su vida, el viaje le había servido para reflexionar, sobre las cosas que le habían pasado en su corta vida.
Durante el crucero, tuvo bastante tiempo para reflexionar, apenas salió del camarote, tan solo un par de veces, una de ellas logró ver a lo lejos a una rubia que le resultó conocida, después viendo la lista del pasaje recordó que la había visto en Monzon alguna vez, esa chica era Leril, mas tarde se acercó a la taberna del barco pero no pudo encontrarse con ella.

Olaya se acercó al mercado para poner a la venta dos leños, justo cuando llegaba logró alcanzar a ver a su amiga Kroke que se marchaba de allí, la saludó con la mano y le regaló una gran sonrisa......... este viaje había dejado a Olaya con a penas dos escudos y ese día tristemente no tenía que comer.

Puso los leños a buen precio, por si el ayuntamiento podía compraselos.
Mayvic


Mayvic pasó como de costumbre, a diario, por el mercado. Ese día, aparte de sus compras de comestibles habituales, debía comprar algunas pieles para unos encargos que ya le habían realizado y, por desgracia, se había quedado sin mercancía. Tenía que ahorrar con prontitud para cambiar su trigo por un campo de ovejas, que le sería mucho más útil.

Encontró por fin un puesto en el que vio unas pieles muy hermosas y de buena calidad, según supo reconocer. Se las llevó casi todas, pero no pudo evitar desconcertarse:

-¿Es que no hay más pieles en todo el mercado? -pensó en voz alta, con cierta preocupación, en breve necesitaría más...

Sin embargo, decidió no preocuparse por el momento y se dirigió al puesto en el que solía comprar los alimentos: "Hay de casi todo: pescados, leche, verduras, pan, maíz... ¡Así da gusto! Tan sólo nos falta la carne...". Compró algo de verduras y leche, alimentación sana.
Pero en el último momento se le ocurrió que podía invitar esa tarde a Jaca a merendar a su casa y compró todos los ingredientes para elaborar un delicioso bizcocho, que le solía quedar riquísimo. Y, muy ilusionada, continuó su camino hacia la sastrería.
See the RP information <<   <   1, 2, 3, 4, 5, 6   >   >>
Copyright © JDWorks, Corbeaunoir & Elissa Ka | Update notes | Support us | 2008 - 2024
Special thanks to our amazing translators : Dunpeal (EN, PT), Eriti (IT), Azureus (FI)